Uno de los productos más típicos de nuestro país son los embutidos. Cualquier turista que venga a España quiere probar el chorizo, el salchichón o una buena sobrasada. En nuestra fábrica de embutidos en Mallorca nos preocupa mucho la calidad, para ofrecer a nuestros clientes los mejores productos. La elaboración es fundamental, y en esta entrada nos vamos a detener precisamente en ese proceso.

La matanza se hace para aprovechar la carne del cerdo para que pueda proporcionar embutidos durante todo el año para la alimentación de la familia.

Para matar al cerdo se agarra entre varias personas. Normalmente el matarife utiliza un gancho para agarrar al cerdo por la mandíbula y llevarlo a un banco de madera en el que van a proceder a la matanza. Junto al cerdo se colocan unos cubos para recoger la sangre que se utilizará para preparar la morcilla.

Cuando el animal se ha muerto se pasa al socarrado, es decir, a quemar la superficie exterior. Se coloca al animal en una cama de un material combustible. Así se elimina también el pelo de la piel. Posteriormente se emplea un cuchillo especial para rasparla y retirar todos los restos de pelos chamuscados.

El siguiente paso es abrir el cerdo para retirar las vísceras y recogerlas con cuidado. Las mujeres son las que se encargan de limpiar los intestinos y el estómago. Mientras, los hombres van limpiando el cerdo y los instrumentos que se han empleado. Por último, se deja el animal colgado de una viga, para que se oree, a buen resguardo de los animales. El picado de la carne se realiza al día siguiente.

El resultado son unos productos de calidad como los que puedes probar en nuestra fábrica de embutidos en Mallorca.

En Ramaders Agrupats te ofrecemos gran calidad al mejor precio.